sábado, 9 de junio de 2012

Anna Karenina (I Avance)


Hacía bastante tiempo que quería leer la novela de Leo Tolstoi, Anna Karenina, pero por alguna razón u otra posponía su lectura; sin embargo por fin me di el tiempo de hacerlo, aunque no con la frecuencia que me gustaría por esos quehaceres, tan aburridos, de los adultos, como el trabajo, que producen tanto agotamiento, que leer dos líneas dan la sensación de una página entera. Pero bien. Anna Karenina, contra todo pronóstico, me está gustando muchísimo, es muy ligera y sus capítulos cortos la hacen muy atractiva. ¡Qué aburridos son, en mi opinión, esos capítulos interminables de algunas novelas! No obstante, siempre hay un pero, lo único que me causa cierta confusión son los nombres de sus personajes: Oblonsky, Vronsky, Arkadievich (que es el mismo que Oblonsky), Levin, Dolly (que es la misma Daria), etc.


Todas las familias felices se parecen unas a otras; pero cada familia infeliz tiene un motivo especial para sentirse desgra­ciada.

La novela inicia presentándonos el hogar de Oblonsky, quien es el mismo que Stiva o Esteban Arkadievich, un hogar que atraviesa serios problemas pues Daria (o Dolly) no perdona la infidelidad de su marido con la institutriz francesa de los niños. A raíz de esto, Oblonsky ha tenido que hacer un llamado de emergencia a su hermana, Anna Arkadievna, Anna Karenina, para que interceda a su favor y su traición sea perdonada –o al menos eso creo, pues apenas voy en el capítulo XVIII–. Pero Anna Karenina, la heroína de esta historia, no aparece todavía. La trama se va desarrollando entre las reuniones de Oblonsky y sus conocidos, en especial con Levin, un amigo de su juventud, que pretende la mano de su cuñada, Kitty.

No obstante la diferencia de sus inclinaciones y caracteres, se querían como suelen quererse dos amigos de la adolescencia.

Pero kitty Scherbazky, hermana de Dolly, no tiene un solo pretendiente, sino dos, Levin y Vronsky, “uno de los más bellos representantes de la juventud dorada de San Pe­tersburgo”. Y pues sí, Levin se anima a declararse a Kitty, no obstante ella le rechaza porque considera a Vronsky más apuesto y la razón de hacer no un matrimonio bueno sino “brillante”.

Finalmente, en el capítulo XVIII aparece Anna Karenina, cuando Vronsky y Oblonsky coinciden en el andén del tren para, uno recoger a su madre y el otro a su hermana.

Antes, creo, había leído (o escuchado) que Anna Karenina trata sobre un escándalo, no estoy segura, y no quiero adelantarme al argumento, “la Karenina” es una mujer casada; pero después del primer encuentro entre ella y Vronsky empiezo a entender por dónde va todo en esta historia, llegué a pensar que Levin sería el héroe acá; ahora creo que estaba equivocada.

Esto no es más que un primer avance de mi lectura. Lo poco que puedo saber de esta novela es eso, el escándalo al que se ve expuesto la Karenina. No sé nada más, y si es que no estoy equivocada al respecto. Por lo tanto cada nuevo capítulo será un novedoso y lindo descubrimiento para mí.
 

1 comentario:

  1. Otro de mis grandes pendientes...Además ha salido una edición preciosa del libro...

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