domingo, 29 de julio de 2012

Hysteria


Contrario a alguna gente, que solo disfruta los feriados que coinciden con los días viernes y lunes -porque así tienen un fin de semana largo-, a mí sí me resultan los que caen en medio de la semana porque son como un domingo adicional. Los feriados en la mitad de la semana me permiten relajarme, holgazanear y tomar tiempo para celebrar una de las actividades que más me causan regocijo; ver películas.
Este pasado 24 de julio, día en que celebramos el natalicio del Libertador, Simón Bolívar, aproveché de ponerme al día con algunas películas que Esposo, dedicadamente, había ubicado para mí; entre ellas, Hysteria.
No sabía de qué trataba Hysteria, solo sabía que se trataba de una película inglesa de época; lo que no imaginaba es que trata de la creación –y sus entretelones– de un popular invento que hoy en día es adquirido, especialmente, por el público femenino.

En Londres de 1.880, el Dr. Granville es un médico progresista sobre el cuidado de los enfermos, promueve el lavado de las manos y la limpieza de las heridas como medida para prevenir enfermedades y la septicemia, pero los hospitales son comandados por otros médicos que emplean la medicina tradicional, que está opuesta a los adelantos de la medicina. Cuando el doctor Granville es devuelto de la práctica por haber intentado cambiar el curtido vendaje de una anciana enferma, decide renunciar a los hospitales para ejercer la profesión individualmente; y la manera que tiene para hacerlo es unirse a la práctica privada del doctor Robert Dalrymple, cuya consulta consiste en tratar a las señoras adineradas que padecen Histeria.
Histeria es una película inglesa del género romance y period drama, protagonizada por Hugh Dancy y Maggie Gyllenhaal, que expone las situaciones durante la praxis de la medicina de un médico de clase media, su adinerado mentor y su millonario amigo, cuando las circunstancias lo llevan a crear, con fines medicinales, uno de los inventos más populares de hoy en día, el consolador.    
Esta película me encantó; primero, porque es una película inglesa, lo cual asegura que sea de gran calidad; segundo, porque es period drama, costume drama: una película de época; tercero, porque es simpatiquísima, impregnada del más agradable humor inglés; cuarto, porque su protagonista femenina, el personaje Charlotte Dalrymple (Maggie Gyllehaal), es progresista, tiene una mente adelantada a su época, e idealista y el protagonista masculino, el doctor Granville (Hugh Dancy) es encantador, inocente, simpático e influenciado por el personaje femenino –me encanta cuando esto sucede en estas historias–; y cuarto, porque es preciosamente romántica. Adicionalmente, es enriquecedor conocer cómo solía ser tratada la inexistente “histeria femenina” en aquel tiempo, los adelantos alcanzados en la medicina y el giro que ocasiona la peculiar práctica cuando, el doctor Granville, por su propia afección, hace una mala práctica a una de las “pacientes histéricas” que luego produce la creación de uno de los artefactos eróticos más consumidos hoy en día.
En mi lista de películas favoritas que he visto este año...
 
...Por cierto, no se trata de una película erótica.

viernes, 20 de julio de 2012

The Amazing Spider-man

Realmente creo que no soy buena para revisar películas del box office, pero intentaré hacerlo esta vez. Siempre me ha gustado la historia de Spider-man -por lo menos desde que salió aquella película de Tobey Maguire-, mas no recuerdo que fuera una gran fanática siendo más joven; sin embargo, sí recuerdo vagamente que veía la caricatura que transmitía uno de los canales de televisión nacional, cuando era niña, y me parecía muy entretenida... y esto que no se enamoraba en la caricatura, solo luchaba contra el mal; lo que me parecía extraordinario... Podría decirse que es mi súper héroe favorito... de tener uno.

Pues bien, este año reapareció en el cine no un nuevo Spider-man, sino un Sorprendente Spider-man -ah, que en mi época solía conocerse simplemente como Hombre Araña-. Peter Parker, ya no representado por Tobey Maguire -comienzan las comparaciones- sino por el actor estadounidense-inglés, Andrew Garfield, emprende nuevas aventuras con sus recién encontrados súper poderes, al ser mordido por una peculiar araña mientras visitaba el laboratorio Oscorp, donde esperaba hallar alguna pista para encontrar a su padre, a quien perdió, extrañamente, cuando era niño, dejándolo a cargo de sus tíos. El chico, experimentando sus nuevas habilidades, desarrolla también una etapa de rebeldía que deriva de la pérdida de su tío Ben. Es entonces cuando Peter toma la justicia en sus manos para hallar al responsable de la muerte de quien sería su padre sentimental.

Básicamente la misma historia narrada de otra manera, The Amazing Spider-man logró llenar mis expectativas; no sé si será porque de alguna forma es mi súper héroe favorito -de tenerlo- o porque en realidad la película es extraordinaria; lo que sí sé es que la química entre Andrew Garfield y Emma Stone tuvo que ver mucho con que me gustara tanto esta nueva versión; aunque si tuviera que escoger entre ésta y la de Tobey, me quedaría con la pareja protagónica de ésta pero con el argumento de la otra. Andrew es un perfecto Spider-man, en mi opinión. Definitivamente me gustó. Interesante giro para un nuevo comienzo.

viernes, 13 de julio de 2012

When Harry Met Sally


Probablemente When Harry Met Sally sea la película más importante de Nora Ephron. Ephron escribió el guión y fue nominada al premio Oscar por el mismo. El argumento es precioso, adelantado a su tiempo –me gustaría decir–, muy romántico, profundo y divertido. Los diálogos son deliciosos. Lo que más me gustó, ahora que volví a ver la película, es la entereza con la que su protagonista (Sally) enfrenta, como mujer, las complicaciones de las relaciones, tan comunes hoy en día, en la época que fue exhibida la película; ser soltera a los treinta; aceptar la posibilidad de no casarse nunca porque ya tienes más de treinta años y la mayoría de los hombres, de tu edad, ya están casados; formar una familia y tantos otros enredos que se nos cruza en el cerebro a todas las mujeres. Hoy que vi por segunda vez la película comprendí por qué es tan valorada entre las historias de Ephron.

Sally conoce a Harry en el año 1.977 cuando, después de graduarse de la universidad, como favor a su amiga Amanda, quien es la novia de Harry, conducen juntos desde Chicago hasta Nueva York. Los recién conocidos intercambian cualquier tipo de opiniones, cada uno con su punto de vista tan definido que se caen mal, no obstante comparten tantos criterios que logran conocerse muy bien. La cosa se complica cuando Harry le manifiesta a Sally lo atractiva que es. Sally le rechaza por ser el novio de su amiga, sin embargo le propone que sean amigos, lo cual no es conveniente para Harry pues él asegura que los hombres no pueden ser amigos de las mujeres que consideran atractivas; lo que ella lamenta puesto que él habría sido la única persona que conocía en Nueva York.

That´s too bad, you´d be the only person that I knew in New York.
Cinco años después se encuentran en un aeropuerto. Sally es novia de Joe, un amigo de Harry, y Harry está comprometido con Helen, pero Harry actúa como si no la recordase, aunque en el avión ya no disimula que no la recuerda y se ponen al día con sus vidas desde la última vez que se vieron, con la misma antipatía de la primera reunión. Cinco años más tarde se reencuentran nuevamente, Sally había terminado su relación con Joe y Harry se estaba divorciando de Helen. A partir de entonces inicia la compleja historia de amor entre dos personas que pasan de ser conocidos a amigos a enamorados.

Para mí, que siempre he admirado el trabajo de Nora Ephron, es muy triste saber que no habrá nuevos proyectos de la escritora, productora y directora; sin embargo nos dejó un legado importante, de personajes inteligentes e historias creativas e ingeniosas. When Harry Met Sally (Cuando Harry Conoció a Sally) es una de sus comedias románticas más relevantes. Me encantó de ella la profundidad, complejidad y madurez de sus personajes, y su relación, a través de los años. Me fascinó el hecho de que, al ser una película de 1.989, su argumento estuviera todavía tan vigente. ¿Ya mencioné lo maravillosos que son sus diálogos…? Una delicia. Y los entretelones son de ensueño, el Nueva York adecuado para el romanticismo requerido. Una joya.

Wanderlust


Qué divertido es cuando algunas comedias del cine te sorprenden. Así me pasó con Wanderlust.

George y Linda ponen todo su esfuerzo en comprar, aun en recesión económica, un Microloft (apartamento tipo estudio) en el West Village de Nueva York, pero este sueño culmina cuando George es despedido de su trabajo y HBO rechaza, por considerarlo muy deprimente, el documental sobre un pingüino enfermo de cáncer testicular, que Linda había producido. De esta manera, el matrimonio se ve en la necesidad de renunciar a sus costumbres para marcharse a Atlanta, donde vive el hermano mayor de George. Durante la travesía, para descansar, se hospedan en un particular lugar, Elysium, Bed and Breakfast, que termina seduciendo a la pareja pues, más que un Bed and Breakfast, es una morada donde la gente vive libre, sin inhibicions o restricciones.

Wanderlust es una comedia hilarante, graciosa, algo grotesca, divertida y todos los adjetivos simpáticos que se le pueda sumar. Me pareció muy cómica, quizás, porque no lo esperaba. Había visto los entretelones, los comerciales y la publicidad de la película, sin embargo, tal vez, como se trataba de un tema poco llamativo a mi interés, dos visitantes en una comuna hippie, no me había cautivado del todo, o llamado la atención –a pesar de tratarse de una película de Jennifer Aniston–. Pero sabía que terminaría viéndola. Y me encantó. Jennifer es preciosa, como siempre, Paul Rudd es estupendo, pero quien se roba el espectáculo, en mi opinión, es Justin Theroux, que seductora y jocosamente interpreta a Seth, el líder de la comuna.
También participan en la película: Malin Akerman, Ken Marino, Kathryn Hahn y Alan Alda.
¡Excelente comedia!


American Reunion


Este año regresó al cine la secuela de una de las comedias más divertidas de mi generación, American Pie, American Reunion.

El argumento de la película se basa en la reunión de la clase del ´99. Han transcurrido trece años desde que el grupo se graduó de High School  y han decidido reunirse, pero ¿qué pasó en todo este tiempo con Jim, Oz, Kevin, Finch y Stifler? El matrimonio de Jim y Michelle tiene problemas de intimidad, lo cual está afectando la relación. Oz es comentarista de deportes, pero últimamente no se siente muy orgulloso porque participó en uno de esos reality show de baile y fue vergonzosamente eliminado. Kevin, aunque felizmente casado, se siente contento de alejarse unos días de la convivencia matrimonial. Finch es el más interesante de los exalumnos, su vida ha sido una aventura desde entonces y hace alarde de haber recorrido el mundo entero. Y Stiffler es el mismo Stiffler de las películas anteriores, inmaduro, ocurrente, soltero y buscapleitos, metiendo a sus amigos en problemas. La diversión se centra en la reunión de exalumnos y las locuras de los amigos, pero el enredo principal se enfoca en el enamoramiento que siente Kara por Jim; Kara es una muchacha de dieciocho años, a quien Jim solía cuidar cuando era una niña, y con la que se reencuentra en la víspera de la reunión.

Fue divertido haber visto al clan reunido nuevamente. La película es tan subida de tono como todas las anteriores, los enredos muy creativos y las situaciones tanto embarazosas como novedosas. Digamos que no es mi comedia favorita del año pero sí fue agradable retomar, especialmente porque todo el elenco se reunió para la historia, siquiera para una aparición muy pequeña, lo que cuenta como algo importante para aquellos que disfrutamos American Pie, la primera vez.

viernes, 6 de julio de 2012

The Lonely Hearts Club - Book


Algunas veces creo que siempre tendré 17 años.

La última vez que viajé a Caracas en avión –me encanta el Aeropuerto Nacional de Maiquetía por sus pequeñas librerías–, me paseé por sus instalaciones buscando qué comprar, y por qué comprar me refería a algún libro. Enfáticamente buscaba la novela Anna Karenina, de Leo Tolstoi,  pero, como es de suponerse, no la vendían (¡qué difícil es comprar estos clásicos en este país!); en su lugar me tropecé con un libro cuyo título es el siguiente: El Club de los Corazones Solitarios – Elizabeht Eulberg, lo vi y su título no me atrajo, pensé que sería algo de autoayuda, no sé por qué, así que lo ignoré. Me di otra vuelta en la misma librería y volví a tomarlo; el libro estaba empapelado, así que no habría manera de saber qué estaba escrito en él, y tampoco anunciaba que se trataba de una novela. Le di la vuelta, el resumen hablaba en primera persona sobre una Penny Lane, una Penny Lane que decretaba que estaba harta de los chicos y que renunciaba a ellos; otra declaración que me llevaba a creer que se trataba de un libro de autoayuda… y no, no estaba dispuesta a ello; entonces leí la siguiente cita en la parte inferior de la contratapa:
Una lectura para todos aquellos que se hayan enamorado alguna vez… o renegado completamente del amor. ¡Un divertido y fantástico debut!
Stephenie Meyer.

Sí, Stephenie Meyer, la mismísima Stephenie Meyer –Crepúsculo – Stephenie Meyer–, recomendaba el libro. Ya sabía que Stephenie Meyer recomendaba libros; lo sabía porque lo había hecho con The Hunger Games... y ahora con éste. Sentí curiosidad. Merodeé otro rato por el aeropuerto, antes del departure, hasta que mi curiosidad pudo más que mis prejuicios; me dirigí a la pequeña tienda y adquirí el libro. Además, no hay mejor distracción para calmar los nervios al viajar en avión que un libro entretenido.  

Conozco la música de Los Beatles porque mi papá siempre ha sido gran admirador del grupo, help, yesterday, Come Together, Penny Lane,  Here Comes the Sun, y mi favorita All you Need is Love –por la película Love Actually–, entre otras, son algunas de las canciones que, recuerdo, escuchaba los sábados familiares en la noche, cuando yo todavía era una niña, y él colocaba sus álbumes favoritos en su tocadiscos; mas yo misma nunca he sido gran admiradora de ellos. No sé por qué. Lo cierto es que muchos de estos recuerdos saltaron a mi memoria mientras leí las referencias sobre las mismas canciones en la novela El Club de los Corazones Solitarios.  

El Club de los Corazones Solitarios (The Lonely Hearts Club) es una novela para Jóvenes Adultos, de los géneros Young Adults y Chick Lit (Literatura para Chicas), escrita por Elizabeth Eulberg, directora de la publicidad global de Stephenie Meyer, que narra las desventuras amorosas de su protagonista, Penny Lane, sí, justamente, como esa canción de Los Beatles, una chica de dieciséis años cuyas desventuras la obligan a decretar que no saldrá con otro chico mientras estudie en la escuela McKinley, bautizando su club, aun cuando ella era la socia única, con el nombre The Lonely Hearts Club (El Club de los Corazones Solitarios); exactamente, como esa canción de los Beattles, Sgt. Pepper´s Lonely Hearts Club Band. Correcto, el libro está lleno de referencias de la famosa agrupación inglesa, y es una delicia para aquellos que aprecien estos clásicos… como si el libro tuviera su propia banda sonora.
Lo cierto es que Penny Lane revoluciona la escuela con su club, desde la chica popular hasta la que no lo es quieren formar parte de éste, que antepone la amistad, los estudios, la esencia femenina y la hermandad a cualquier chico, pues establece como una de las reglas más resaltantes que las socias no pueden tener novio, lo que resulta un cruel inconveniente porque, justamente, Penny, a pesar de decretar que no desea involucrarse con chicos de su escuela, se ve envuelta en una tierna amistad con uno de los muchachos más populares de la escuela.

Me divertí mucho leyendo The Lonely Hearts Club, de alguna manera me pareció que tenía dieciséis años otra vez y que cada capítulo era como ver un episodio de una de esas adictivas series para adolescentes que transmiten en la televisión, bueno, una de esas series para adolescentes pero mucho más inocente. En mi caso soy una adulta joven, no una joven adulta, y aun así disfruto con entusiasmo este tipo de lecturas; sin embargo es precisa para el público adolescente.