sábado, 30 de marzo de 2013

Trouble with the Curve



Me gustaría saber algo de baseball cuando veo películas como Moneyball o Trouble with the Curve; el escaso conocimiento que tengo de este deporte es insuficiente, a veces, para tener una idea más completa del objeto de la historia; sin embargo son dos películas que me han encantado a pesar de no ser aficionada al deporte. De hecho, solo puedo ver este deporte en películas.


Una de las películas del 2.012 que llamaron la atención del público y los críticos por su contenido nostálgico y emotivo ha sido Trouble with Curve, protagonizada por Clint Eastwood, Amy Adams y Justin Timberlake, pues gira en relación a un cazatalentos de promesas del baseball en el ocaso de su vida.
Gus (Clint Eastwood) es un cazatalentos de promesas del baseball que ha reclutado a estrellas como (cito): “Ralph Garr”, “Dusty Baker”, “Dale Murphy”, entre otros, pero con el cambio que ha progresado en el deporte, a través la tecnología, el método de Gus, quien está perdiendo la visión y usa audífonos constantemente, se está volviendo obsoleto. Gus continúa asistiendo a los partidos de las secundarias o universidades para reclutar nuevos talentos. El dilema sucede cuando su experiencia se ve cuestionada al recomendar que los Braves no contraten a Gentry, la estrella naciente, porque no puede batear una curva.
Desde el año pasado no he tenido buenos reencuentros con el cine pero Trouble with the Curve me ha devuelto la fe. Me encantó esta película por su emotiva historia, que se centra, a su vez, en la reconciliación de un padre con su hija, interpretada por Amy Adams; una joven que deberá controlar su adicción al trabajo para reconectarse con él. Forma también parte del argumento, Johnny (Justin Timberlake), a quien debo dar el crédito de aportar frescura a la película. Algo debe tener Justin Timberlake, el actor, para que continúe prestando su encanto a películas importantes en Hollywood aunque aun me parezca algo inexpresivo en su manera de actuar; sin embargo siempre le dejo el beneficio de la duda.
Trouble with the Curve, un encanto de película.

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