sábado, 19 de enero de 2013

Fifty Shades Darker - Freed



Es complejo exponer cómo me siento sobre la trilogía de moda, Fifty Shades of Grey.
Como expuse en mi entrada anterior, sobre Fifty Shades of Grey, mi principal disgusto con esta novela es el paralelismo que tiene con la serie de libros de Stephenie Meyer, Twilight, de la que soy aficionada, aunque este paralelismo es menos perceptible en Fifty Shades Darker, que fue, sin duda, la novela que más me gustó entre las tres. Pero comencemos.

Fifty Shades Darker
Si alguien no ha leído alguna de estas novelas y tiene intención de sorprenderse mientras la lee, absténgase de ver esta entrada.

Retomando el hilo de la historia; en Fifty Shades of Grey, la novela escrita por la autora inglesa E.L. James, Anastasia Steele, una joven estudiante de literatura inglesa de la WSU entrevista para el periódico que edita a su amiga, Katherine Kavanahg, al exitoso, y tremendamente bien parecido, empresario Christian Grey. La atracción entre ellos es instantánea y Christian le busca nuevamente para proponerle un curioso acuerdo; Christian es, de alguna manera, un hombre medio pervertido que practica el sexo duro. El asunto está en que la chica Steele es una jovencita inocente enteramente y él debe convencerla para que sea su sumisa, estado que ella estudia aceptar mientras va probando las habilidades experimentadas de su amante, pero la relación se estropea cuando en una de las prácticas de BDSM, Christian se extralimita con Ana y Ana le deja humillada ante el maltrato físico y psicológico que sufre. El top de aquella novela para mí.
Cincuenta Sombras más Oscuras (Fifty Shades Darker) inicia con Ana todavía abatida por el término de su relación con Christian pero intentando hacerse una carrera profesional como la asistente de Jack Hyde, editor de SIP, una editorial independiente de Seattle.
Lo cierto es que la depresión de Ana por Christian no sobrepasa los dos primero capítulos ni cinco días de duelo, en seguida están de vuelta, lo cual me decepcionó un poco pues pensé que habría algo más de sufrimiento, al fin y al cabo es su primer amor, y resultó un tipo pervertido; y es el hilo de los hechos en New Moon (*intentando ser irónica*); sin embargo las cosas se van dando bien.
El centro de esta novela, para mí, se enfoca en la principal confesión de Christian, el chico admite que todas sus sumisas cumplen con un patrón, son pequeñas, delgadas y de cabellera oscura porque, reconoce, le recuerdan a su progenitora y por eso le gusta maltratarlas. Antes que esta confesión sea dicha, Ana le promete que nunca más le dejará y la chica no se agobia por la menuda confesión sino que Christian le permite que asista con él a una de las consultas psiquiátricas que mantiene con el doctor Flynn, quien le tranquiliza a Ana al respecto.
Como ya expuse, si tuviera que escoger una novela favorita entre las tres, Fifty Shades Darker sería la que más me gustó por ser la más romántica. Primero, Grey se muestra arrepentido y confiesa que las palabras que tuvo Ana para con él durante su último encuentro y que le hubiera dejado significaron el gran giro que dio a su estilo de vida, el BDSM por una relación vainilla. Los encuentros entre ellos son muy románticos, ya no hay tanto erotismo sino más romanticismo y mi parte favorita del libro, a pesar de que Grey le propone matrimonio, es cuando le permite tocarlo, lo que resume un gran gesto de amor para él. Lo más inquietante fue cuando, implorando el perdón de Ana, se tiende a sus pies en posición de sumiso. Eso fue bajo, aunque, visto desde el ojo de la autora y para enriquecer el libro, supongo, era necesario demostrar esa fragilidad en este caballero oscuro.
Los momentos de acción suceden cuando Leila, una antigua sumisa, empieza a acecharlos poniendo en riesgo la vida de Ana cuando irrumpe en su departamento armada. Esta escena es importante porque verdaderamente puede observarse la relación Amo-sumisa entre Christian y Leila, aunque él solo adopta esa posición para poder desarmarla. Otra escena importante sucede en el cumpleaños de Christian cuando Elena, la mujer que le ingresó en ese alocado mundo, interfiere entre él y Ana, y Grace, la madre de Christian, le escucha confesar que fueron amantes cuando él era muy joven. Christian le reconoce a Ana que, que su madre se enterara de esa verdad parcial fue como quitarse un gran peso de encima. En la oficina, Jack Hyde intenta sobrepasarse con Ana, entonces Christian, quien compró SIP, luego de una merecida paliza, le despide. Y, la angustia se apodera de toda la familia y familiares cuando en un viaje a Vancouver, por negocios, el Charlie Tango, el helicóptero de Christian, sufre una grave avería que le obliga a hacer un peligroso aterrizaje, lo cual expone los nervios de sus familiares pues ellos y Ana le creen muerto al saber que el helicóptero estaba desaparecido. Pero el hombre regresa vivo y coleando.

Fifty Shades Freed
Al mejor estilo de Breaking Dawn, como no podía haber dos narradores acá -a menos que uno fuera Christian, pero no optó por esto-, la autora emplea la narración en retrospectiva; va y viene del pasado al presente; bueno, no tanto al pasado sino de la boda a la luna de miel y va transportando al lector de esa manera hasta que Ana y Christian regresan a Seattle. En Seattle deben afrontar nuevos problemas, mientras estaban de luna de miel la oficina de Christian tuvo un intento de incendio. También, en una secuencia de acción, Ana se libra con su marido de un vehículo que les venía siguiendo. Descubren que el autor de cada crimen, el Charlie Tango y el incendio de la oficina de Christian es responsabilidad de Jack Hyde, quien había estado detenido por el acoso contra Ana y que es sacado de prisión con una fianza que paga Linc, el esposo de Elena, pero esta última intriga la conocemos al final de la novela; así como otros anécdotas que no voy a revelar porque le quitarán todo el suspenso a esta historia. Pero digamos que es muy, pero muy, Breaking Dawn.
Lo que me gustó más de esta última novela es el progreso de Christian y lo que más me encantó es que Ana ya podía tocarlo sin reservas aunque en pocas oportunidades le solicitara su aprobación para hacerlo.
Hay muchos otros detalles de Fifty Shades Freed (Cincuenta Sombras Liberadas) que me estoy reservando, por la emoción que sugieren, pero hay una parte crucial en la historia que revela toda la vulnerabilidad de este complejo hombre y que le deja expuesto de todos sus temores, demonios y fantasmas de la manera más adorable e intensa aun cuando estaba preso de sus miedos.

Fifty Shades of Grey Trilogía, sentimientos encontrados, no sé si me gustó muchísimo o si no me gustó nada, pero dejo a su favor que la autora creó un personaje complejo, casi Brontesco, y encantador, que es Christian Grey, y que es el centro de esta novela, al que le perdonamos todo y al que todas queremos darle cariño.

2 comentarios:

  1. TOTALMENTE de acuerdo con tus palabras finales...^_^^ ¡Lo suscribo!
    Adictivo, complejo... encantador..creo que tardaré mucho en olvidarle...
    Por cierto...
    http://unamujerartista.blogspot.com.es/2013/01/azul.html

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  2. Obsesivo. Jejeje. ¿Te parece demasiado loco, obseso, que lo esté leyendo nuevamente? Me ha servido para detallar más la relación Christian-Anastasia. Ya veo tu entrada. ;)

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